Abacaba y la música
Por razones laborales (dictar un curso de análisis), he vuelto a revisar viejos apuntes sobre música de Anton Webern.
Más allá de la satisfacción que en su momento me dio el hecho de "entender" cuál era el procedimiento compositivo utilizado en sus piezas, y seguir disfrutando sensiblemente en la actualidad de una música que creo es increíblemente maravillosa (como por ejemplo los Op 27, Op 28, Op 29, Op 30), me he puesto a reflexionar sobre el paradigma de los palíndromos y su estructura formal "lógica".
Más allá de la satisfacción que en su momento me dio el hecho de "entender" cuál era el procedimiento compositivo utilizado en sus piezas, y seguir disfrutando sensiblemente en la actualidad de una música que creo es increíblemente maravillosa (como por ejemplo los Op 27, Op 28, Op 29, Op 30), me he puesto a reflexionar sobre el paradigma de los palíndromos y su estructura formal "lógica".
El archiconocido:
DÁBALE ARROZ A LA ZORRA EL ABAD
el regional:
NEUQUÉN
ambos con la manchita "lógica" del acento. Entonces, no parece ser cierto que se leen exactamente igual del derecho al revés y viceversa.
Por supuesto, está el incomparable palíndromo guía espiritual de Webern:
Por supuesto, está el incomparable palíndromo guía espiritual de Webern:
S A T O R
A R E P O
T E N E T
O P E R A
R O T A S
que está en latín, y no solo se lee de derecha a izquierda y viceversa, sino de arriba a abajo y viceversa. De latín no entiendo, pero soy latino. Ya sé que no es lo mismo entender que ser. Mejor dicho, soy latino-americano, por lo tanto, parece estar claro y ser lógico que las cosas no son iguales al derecho o al revés. Hay una vieja canción de María Elena Walsh sobre el tema. ¿No?
Quizás algo tenga que ver con la música, con el arte.
PD: Por aquí me acotan que el palíndromo no es una estructura formal lógica, sino una estructura formal curiosa.
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